domingo, 24 de marzo de 2013

Seguimos con guisantes y rabanitos

El tiempo no nos da mucha tregua, aún así el jueves 20 salieron los dos grupos de 2ºA y 2º B que faltaban , semillaron guisantes y rabanitos, limpiaron de hierbas los parterres del 3er ciclo y conocieron a la mascota del huerto, un conejito que vive en una zanahoria, nos lo ha hecho Mónica y a todos les encanta, estamos buscando nombre y por ahora Zanahoria y Blanquito son los que tienen más votos:

Semillando con mucho mimo
Limpiando las herramientas

Cosecha de zanahorias

Los chicos escribiendo en el diario del huerto y en primer plano la mascota del huerto ¡que mona!

Han empezado a florecer los bulbos de Narciso, así que también hemos aprovechado para contarles el origen de ese nombre:
NARCISO Y ECO
Narciso, hijo del río Céfiso y la bella Liríope, era tan hermoso que desde el momento de nacer fue amado por todas las ninfas. Su madre acudió al adivino Tiresias para que le pronosticara si su hijo viviría muchos años. La respuesta, fue:
- Tu hijo vivirá muchos años si no se ve a sí mismo.

Creció Narciso, con tales gracias que las mujeres le perseguían para amarle, pero él las rechazaba a todas. Un día que Narciso paseaba por el bosque le sorprendió la ninfa Eco que había sido castigada por la diosa Hera, esposa de Zeus, a que jamás podría hablar por completo; su boca sólo podría pronunciar las últimas sílabas de aquello que escuchara.

Eco se enamoró de Narciso nada más verlo y le fue siguiendo sin que él se diera cuenta. Cuando se decidió a acercarse las palabras se negaron a salir de su boca y se ocultó detrás de un árbol seco.
Mientras tanto Narciso hablaba con las flores del bosque:
- Hermosa flor, flor olorosa...
- Rosa -repitió Eco-.
Narciso escuchó la voz de Eco y gritó:
- ¿Hay alguien por aquí?
- Aquí, aquí -respondió la ninfa-.
Narciso, al oír a Eco, contestó:
- ¿Quién se oculta cerca de ese árbol seco?
Y la bella ninfa salió de entre los árboles con los brazos abiertos diciendo:
- Eco, Eco.
Cuando se encuentran, Eco abraza a Narciso, pero éste la rechaza y le dice:
- No pensarás que yo te amo...
- ¡Yo te amo!, ¡yo te amo! -le contesta Eco-.
Entonces gritó Narciso:
- No puedo amarte.
- Puedo amarte-repetía con pasión Eco-.
Narciso huye entre los árboles diciendo:
- No me sigas, ¡adiós!
- Adiós, adiós -contesta Eco-.

La menospreciada Eco se refugia en el espesor del bosque. Consumida por su terrible pasión, delira, se enfurece y piensa: «Ojalá cuando él ame como yo le amo, se desespere como me desespero yo».
Némesis, diosa de la venganza, escuchó su ruego. En un tranquilo valle había una laguna, de aguas claras, que jamás había sido enturbiada, ni por el cieno, ni por los hocicos de los ganados. A esa laguna llegó Narciso y, cuando se tumbó en la hierba para beber, Cupido le clavó, por la espalda, su flecha del amor,... lo primero que vio Narciso fue su propia imagen, reflejada en las limpias aguas y creyó que aquel rostro hermosísimo que contemplaba era el de un ser real, ajeno a sí mismo. Se enamoró de aquellos ojos que relucían como luceros, de aquellas mejillas imberbes, de aquel cuello esbelto, de aquellos cabellos negros. Se había enamorado de... él mismo y ya no le importó nada más que su imagen. Permaneció largo tiempo contemplándose en el estanque y poco a poco fue tomando los frescos colores de esas manzanas, coloradas por un lado, blanquecinas y doradas por otro, transformándose lentamente en una flor hermosísima que al borde de las aguas seguía contemplándose en el espejo del lago.
En el mismo instante en que Narciso se transformó en flor, Eco se desmoronó en la hierba, muerta de amor. El cuerpo de Eco nunca se pudo encontrar pero en los montes y valles de cualquier parte del mundo, aún responde a las últimas sílabas de las voces humanas.


Nuestros Narcisos

Encantados de descubrir que las mariquitas ya están en el huerto para ayudarnos en la lucha contra los pulgones

El viernes 22 empezamos bien, con un grupo de 3º que continuó con las siembras y con plantaciones de bulbos, pero al final de la primera hora empezaron a caer las primeras gotas, tuvimos suerte y pudimos seguir con otro grupo de 1º de 10 a 11 pero el tiempo iba cada vez peor y anulamos el resto de las salidas.
Tenemos un plantador de bulbos muy chulo, que hace los hoyos perfectos y de la profundidad exacta que necesita cada especie
Más siembras directas
Los niños de 1º sacando semillas de las vainas de los rabanitos para plantarlas después en sus ruedas
Nos han dado una calabaza de adorno, la hemos abierto para sacar las semillas, que se sequen un poco y plantarlas a la vuelta de vacaciones.
Esperemos que para entonces el tiempo se asiente y podamos salir más al huerto,

domingo, 10 de marzo de 2013

Empezamos con las siembras directas y los semilleros

La semana pasada tuvimos que aplazar las salidas al huerto porque hacía muchísimo frio y el huerto estaba bastante helado como para poder hacer algo; pero esta semana hemos tenido más suerte y han podido salir todos los grupos menos uno de los de primero porque se puso a llover justo a esa hora (viernes a las 10:00).

El jueves salieron dos grupos de 6/7 niños de 2º B de 11 a 12 y de 2º A de 1 a 2; estuvimos viendo las rotaciones de cultivos, que podíamos plantar en estas fechas, decidieron que Guisantes y Rabanitos para que nos diera tiempo en Mayo a plantar más cosas ya que son de ciclo rápido.
Estudiamos bien cómo había que plantar y salimos al huerto a hacerlo.
También podamos un poco las Salvias, y les hizo muchas ilusión llevarse una ramita a casa porque huelen muy bien, pudieron repartirlas con sus compañeros de clase.
Regando guisantes y rabanitos recién plantados

El grupo de 2ºB antes de volver a clase

Podando las salvias

2ºA sacó unos ajetes


El viernes tuvimos la suerte de contar con Juan, que nos trajo unas  parras de sus viñedos (Herrero Bodega) y además las plantó con nosotros y nos contó muchas cosas interesantes:


Escuchando a Juan que nos cuenta el tamaño del hoyo que tenemos que hacer

Y los chicos hicieron unas buenos hoyos

Echan tierra, la sujetan bien y continúan echando tierra
Juan nos enseña las pequeñas raicillas que van a permitir a la planta agarrar en el terreno

Plantando esta pequeña en esta zona


Con otro grupo de 3º haciendo un semillero de tomates

El viernes, además, plantaron también rabanitos y guisantes, los terceros en su bancal y el grupo que pudo salir de primero en sus ruedas y también hicimos algunos experimentos con el suelo: unas pruebas para ver si tiene más arena o más arcilla, una gusanera con algunas lombrices que encontramos para ver cual es su función en el suelo y otra prueba para ver los diferentes perfiles, mezclando varias capas, echando agua y viendo como decantan, quedando los elementos más pesados al fondo del envase que utilizamos.